El cambio climático es un multiplicador de amenazas para los pobres, que amplifica las vulnerabilidades existentes como la pobreza, el hambre y la mala salud. Se estima que casi la mitad de la población mundial es altamente vulnerable al cambio climático, pero no tiene los medios ni las condiciones para adaptarse. Las regiones más pobres del mundo y las personas más pobres que viven en estas, son las que están más afectadas gravemente.
A medida que el cambio climático amenaza con deshacer más de 50 años de reducción de la pobreza global, Trickle Up está ampliando sus programas y asociaciones para responder ayudando a los hogares y comunidades vulnerables a desarrollar resiliencia, identificando riesgos, adaptando los medios de vida, planificando emergencias y trabajando juntos.
